Transferencia por retirado de pulpa

1) Preparar la superficie: lijar levemente y limpiar el polvillo. Pintar con un color claro si fuera necesario. Dejar secar muy bien, la superficie debe estar seca.

2) Extender una fina capa de pegamento sobre la superficie del soporte con pincel, y también sobre el lado impreso de la lámina.

3) Posicionar y pegar la lámina al soporte desde el centro hacia los lados. Cubrir el papel con un nylon y con la ayuda de un trapo o esponja suave presionar sobre el plástico para adherir toda la lámina.

4) Con una tarjeta plástica o plegadera presionar el papel para eliminar las burbujas de aire o exceso de pegamento que pudieran haber quedado. Las burbujas de aire no permitirían que la imagen se transfiera con fidelidad.

5) Retirar el nylon y dejar secar muy bien por 24 horas. Se puede acelerar los tiempos con un secador de pelo.

6) Con una esponja o un trapito humedecidos en agua, o las yemas de los dedos, humedecer y frotar cuidadosamente el reverso blanco de la lámina para aflojar y retirar la pulpa blanca de papel. Vigilar que la humedad no resulte excesiva para evitar arrancar la imagen junto a la pulpa.

7) Cuanto menos gramaje tenga la lámina, menos trabajo y esfuerzo tomará retirar la pulpa de papel. Así quedará transferida la imagen al soporte.

8) Es una técnica que requiere paciencia y un poco de práctica para no pasarse de fuerza al frotar la lámina y dañar parte de la imagen.

9) Proteger con barniz correspondiente según el soporte y el uso que se le dará a la pieza terminada.